29 de diciembre de 2009
Carta abierta al ginecólogo del siglo XXI
Estimado Doctor,
Ante todo, disculpe, por favor, la osadía de enviarle esta carta, soy una anciana hemipléjica y enferma, esperando, de un día a otro, la muerte y no puedo por menos de comunicarle una experiencia mía, con el deseo de que haga la prueda que le propongo y de que le resulte positiva.
Hace muchos años, exactamente en 1945, tuve que sacar el título de practicante en medicina para poner inyecciones a mi única hija enferma, porque no podía pagar a uno que lo hiciera. Para poder presentarme a examen en la Facultad de Medicina de Madrid, tuve que obtener un certificado de Prácticas de Obstetricia, en la antigua Maternidad Provincial de Madrid.
Yo tenía del Parto una idea muy diferente, porque, cuando iba a nacer mi hermano, mi madre me había explicado el embarazo y el parto, de la manera más verídica y sensata que tal cosa se puede explicar. En la niñez, mi hermana y yo nos divertíamos, viendo parir a la gata, más tarde, ya a punto de cumplir dieciseis años, vi parir a la madrastra, mientras mi padre iba en busca de la comadrona y tanto la gata como la madrastra, parieron sin dar muestras de dolor.
No tuve ocasión de presenciar más partos. Solamente tuve una hija y su nacimiento fue por intervención cesárea a causa de estenosis pélvica, con lo que me quedé sin saber lo que era, realmente un parto y, a consecuencia de mi ignorancia, lo que ví y aprendí en la Maternidad me sumió en una gran confusión y decidí hacerme comadrona para poder estudiar concienzudamente el parto, tratando de descubrir por qué dolía la última fase (únicamente aquella), cuando las demás fases del largo y complicado proceso de la reproducción vivípara son siempre indoloras y también lo son las demás funciones fisiológicas, si se ejecutan por un organismo sano y normal.
Desde 1945 llevo estudiando esta cuestión. Gané, por oposición, una plaza como matrona de la Beneficencia Municipal de Madrid, sin más meta que la de poder estudiar el parto, en toda su profundidad. Viajé, cuanto pude a Congresos y Cursos, con la misma intención y trabajé, como comadrona, no sólo en España, aprendiendo siempre algo de cada parto que asistía o presenciaba, comprobando en la práctica lo que leía en los libros.
En 1955, tuve ocasión de asistir a un curso, en París, sobre la Psicoprofilaxis del Dolor en el Parto, que daban los doctores Lamaze,Velay y Bourrel.
En ese curso se afirmaba que las contracciones uterinas dolían debido a la existencia de un reflejo condicionado negativo que, además del dolor, provoca miedo y resistencia a la función, por parte de la mujer.
Me pareció esta explicación del dolor en el parto mucho más admisible que la bíblica y quise comprobar si era verdad. Yo ya había observado, antes del curso que el talante y la educación de la embarazada tenían una gran influencia en el desarrollo del parto y, desde 1955 empecé a practicar una preparación que consiste en enseñar a las embarazadas en qué consiste el embarazo y el parto, comparándolo con otras funciones fisiológicas, para intentar que la mujer lo admita como lo que, verdaderamente es, así como instruirlas sobre la parte activa y voluntaria que, tanto en el embarazo como en el parto, deben asumir.
Esta preparación fue rechazada, argumentando que el descubridor de la formación, en el córtex cerebral de reflejos condicionados fue un fisiologo ruso a quién le fue concedido, por ello, el premio Nobel en 1904 y que los españoles no querían de los rusos, ni el parto sin dolor.
Yo no sé cuales fueron los verdaderos motivos del rechazo, pero si que me costó tener que salir de España porque me expulsaron de todos los puestos de trabajo en los que había sido asumida "a dedo" que eran todos menos el del Ayuntamiento, cuyo sueldo no bastaba para cubrir mis necesidades.
En cuanto pude, regresé a España e intenté volver a trabajar como matrona, sin poderlo conseguir, más que en la plaza que tenía por oposición, pero en los años de exilio había aprendido idiomas y ello me sirvió para ganarme la vida como secretaria y seguir preparando embarazadas y asistiendo partos, como distracción, sin cobrar nada.
En 1976, en la nueva Maternidad Provincial de Madrid, dotada de todos los adelantos modernos, se celebró un "Cursillo de actualización obstétrica para matronas", en el cual, llena de ilusión, me apresuré a inscribirme y en el que intenté, en vano, hacer razonar a profesores y alumnas de que lo que se intentaba era un disparate, en todos los sentidos.
Tan antiguas como el parto, son la respiración, la digestión y la circulación de la sangre y a nadie, en su sano juicio, se le ocurre "dirigirlas", cuando funcionan normalmente.. De lo que la ciencia médica se ocupa es de reconducirlas a la normalidad, si ésta está alterada.
Durante aquel cursillo me pellizcaba los muslos para cerciorarme de que no era una pesadilla, de que estaba despierta, el doctor Caballero Gordo, a quien había conocido, muchos años atrás en la Maternidad de Mesón de Paredes, estaba presentando el "Parto Dirigido, en sustitución del parto normal" .
Después de aquel curso y hasta la fecha, el "Parto dirigido" se ha impuesto en los hospitales, yo he seguido y sigo, preparando psicológicamente a embarazadas, de las que una exigua minoría, se deciden a dar a luz en sus casas, considerando el parto como una función normal, pero la mayoría tienen miedo, acaban por ir al hospital donde, donde el trabajo que hice, preparándolas, se desploma, como un castillo de naipes. Quisiera que, algún obstetra se atreviera a probar un sistema de asistir partos que me ha dado muy buenos resultados durante muchos años y de los que puedo presentarle testimonios recientes. Consiste en concienciar a la mujer de que el parto es una función fisiológica exenta de peligro, dejar que el parto empiece por sí solo y que se desarrolle a su ritmo, respetando sus fases de descanso, entre períodos, sin impaciencia porque termine.
El único artíficio que yo empleaba en el parto era el estetóscopo de Pinard y éste me bastaba para seguir, con toda eficacia, el desarrollo del parto, sin necesidad de tactos vaginales, muy dolorosos para la mujer y no completamente exentos de peligro.
Aprendí la evolución del parto, en buenos y detallados Tratados de Obstetricia, comprobé que lo que decían era verdad, que en el organismo existe un ritmo, un programa, un proyecto a desarrollar, por una fuerza calculada al milímetro y al segundo y que no hay más que dejarla actuar, que con cualquier intervención, lo único que se consigue es perturbar el ritmo natural de la función. Aprendí que la colocación del feto, imprescindible para su salida, y la dilatación del cérvix, si no se interfiere, suelen ser simultáneas y el estetóscopo me servía no sólo para controlas el ritmo cardiaco del feto, sino también su cambio de posición con respecto al abdomen materno, debido a los movimientos de rotación del feto y al descenso de la presentación a los diversos planos de la pelvis.
Nunca presté atención a las dimensiones de la dilatación cervical, no tienen la importancia que se les suele dar. El verdadero problema en el parto consiste en la adaptación del feto al canal pélvico de la madre, que se suele hacer despacio y felizmente, a menos que la actitud de la parturiente, su miedo, su impaciencia, su falta de confianza en sí misma y en quién la asiste, no desencadene una anormal resistencia que impida el desarrollo de la función.
Nunca tuve necesidad de plantearme si la dilatación estaba completa o no, porque cuando ello ocurre, los signos que lo avisan son tan claros, tan convincentes. entre ellos, la formación del canal blando del parto, que no hay el menor peligro de que la cabeza fetal se desprenda de repente. El parto se efectúa siempre, despacio, lenta y suavemente, tengo la suficiente experiencia como para asegurar que es así.
Quisiera que los obstetras del Siglo XXI, probaran a ver si la mujer, sana e informada es capaz de parir con la misma tranquilidad y eficacia que ejecuta las demás funciones fisiológicas. Por probar nada se pierde, no se trata más que de tener paciencia y confianza en que la Naturaleza es capaz de cumplir su cometido sin necesidad de ser reemplazada y la mujer del Siglo XXI, a la que tanto se la consiente en otros terrenos, merece que se la deje parir, que se la consienta cumplir una función normal porque la creo, verdaderamente capaz de ello. No se trata de volver a tiempos pasados, ya lejanos, ahora la mujer sabe hacer muchas cosas para las que no se la creía capacitada, en el tiempo actual, la mujer debe saber parir, como sabe hacer la digestión sin ayudas.
No quisiera haberle ofendido con esta carta, he dedicado mi vida a estudiar el parto, creo que sé muy bien en qué consiste y este conocimiento mío no quiero llevármelo a la tumba, mientras las mujeres y los fetos sufren una enfermedad artificial, una forma de parir peor de la que la Naturaleza les había preparado.
Consuelo Ruíz Vélez-Frías (España) es Matrona Jubilada de la Beneficencia Municipal. Pionera de la Preparación Psicoprofiláctica del Dolor en el Parto (autora del primer libro publicado en España sobre este tema). Presidenta Honoraria de la Asociación Nacer en casa
Fuente: http://www.axel.org.ar/articulos/parto/cartaabierta.htm
23 de noviembre de 2009
Casas de Nacimiento en Uruguay
6 de noviembre de 2009
30 de octubre de 2009
¿Cómo elegir un fular?
Una vez que nos hemos decidido a comprar un fular, se nos plantea un gran dilema. Existen en el mercado varias marcas, tejidos, medidas y modelos y es muy difícil decidir entre ellos sin tener, como ocurre la mayoría de las veces, la posibilidad de verlos siquiera al natural.
Un fular supone generalmente un gasto considerable y, con toda probabilidad, es un portabebés que utilizaremos a diario o casi, hasta que nuestro hijo sea bastante mayorcito, por lo que es importante que quedemos satisfechos con nuestra elección.
Antes de decidirnos por un fular u otro, vale la pena plantearse:
- La experiencia que tenemos en el uso de portabebés en general y fulares en particular.
- Qué tipo de anudados vamos a realizar, pues unos tejidos y longitudes son más adecuados para distintas posiciones que otros.
- El clima en el que vivimos: hay tejidos y anudados más fresquitos y otros que abrigan más a un bebé en un clima frío.
- La edad y, sobre todo, peso del bebé.
- La versatilidad que le pedimos al fular: si lo vamos a combinar con otros portabebés y vamos a usarlo en unas situaciones determinadas, o queremos que nos acompañe en multitud de ocasiones diferentes.
- Gustos personales: cuando llevamos el fular puesto, es la prenda que más se ve, por lo que éste debe agradarnos en aspecto para que nos sintamos bien cuando lo llevemos.
- Extras que nos ofrece un determinado fular: algunas marcas ofrecen la posibilidad de adquirir complementos a juego con el tejido del fular. Además, los nuevos modelos de las distintas marcas tienen una etiqueta en el centro del fular, muy útil para empezar la colocación; mientras muchos de los modelos antiguos carecen de esta señal.
- Características del tejido y los tintes: además de estar en contacto con la piel del bebé, éstos tienden a chupar y morder la tela, sobre todo en el periodo de dentición, por lo que es importante que sean seguros y atóxicos. Muchas marcas realizan todos sus fulares en algodón y otras sólo en determinados modelos por lo que merece la pena informarse.
Fuente: Red Canguro
23 de octubre de 2009
El parto como proceso sanador
14 de octubre de 2009
Libros dedicados al nacimiento respetado
4 de octubre de 2009
Un adiós... a una gran Mujer
13 de septiembre de 2009
Confiar en ti misma
31 de agosto de 2009
Dia Internacional de la PARTERA
29 de agosto de 2009
Semana internacional de la Crianza en Brazos (SICB 09)
Modelos de Parto/Nacimiento: tecnocrático vs holístico
27 de agosto de 2009
Los gemelos también pueden usar Rebozo
30 de julio de 2009
Nacer sin Violencia
¿Has sido víctima de violencia obstétrica?
- Si no te escuchan
- Si no respetan tus deseos
- Si no permiten que estes acompañada
- Si te obligan a acostarte
- Si no respetan tu intimidad y pudor
- Si te niegan información
- Si te hacen callar
- Si realizan prácticas sobre tu cuerpo sin tu consentimiento
- Si no te dejan elegir la posición en tu parto
- Si se llevan a tu bebé de tu lado sin causa justificable
29 de junio de 2009
Dolor durante el Parto
- Libertad de movimiento
- Uso del agua
- Uso del calor
- Exposición al sol
- Toque de mano (masaje)
- Acumpuntura o digitopuntura
- Psicoterapia, estimulación de los cinco sentidos para crear un ambiente agradable: música, aromas, luz tenue y en colores pardos, velas, contacto piel-piel
- Risas y buen humor
- Besos, caricias, mimos
- Espiritualidad y meditación
- Acompañamiento de una Partera Profesional
- Presencia de aquellas personas que la mujer elija
17 de mayo de 2009
Parto natural
5 de mayo de 2009
Autonomía de la Profesión de Partería
La partera practica de manera autónoma cuando tiene:
- Reconocimiento oficial como servidora de salud primaria.
- Cuerpo regulador donde sus miembros sean parteras, no enfermeras o doctores.
- Privilegios de prescripción de medicamentos farmacéuticos para una práctica segura, como oxitócicos para detener hemorragias.
- Relación de colaboración con los médicos, en otras palabras: no requerimientos de supervisión médica sobre la labor de las parteras; tampoco un médico tiene que estar presente cuando una partera atiende a una mujer; ni una partera debe firmar acuerdos con su médico de respaldo.
- El derecho de atender en cualquier ambiente: el hogar, centros de maternidad y hospitales.
- Reembolso por aseguradoras.
- Servicios pagos por el gobierno en países con sistemas de salud públicos.
- Regulaciones que le permitan una práctica amplia, incluyendo cuidado ginecológico, partos vaginales luego de cesárea, partos pelvianos y de gemelos.
- Privilegios de hospital y el derecho de transportar a una mujer al hospital y de atenderla si el plan de parto en el hogar resultó en un transporte.
- La habilidad de establecer y dirigir programas educativos de partería, independientes o relacionados a otra institución de enseñanza, costeados por el gobierno o de manera privada, que enseñe el modelo de cuidados de la partería que es reconocido internacionalmente—un modelo centrado en la mujer basado en una combinación juiciosa de amabilidad, cuidados meticulosos, evidencia científica, experiencia empírica y propiedad cultural. Involucrar al consumidor en la fundación y conservación de los programas educativos de partería es esencial para asegurar su integridad y adherencia al modelo de cuidados de la partería.
—Robbie Davis-Floyd, PhD, Miembro Principal de Investigaciones Departamento de Antropología, Universidad de Texas.
La Red latinoamericana y del Caribe por la Humanización del Parto y Nacimiento adopta este concepto de autonomía para la práctica de la partería.
Formalmente aceptado por la Alianza Internacional de Parteras
Se puede usar en reglamentos de organizaciones y esferas políticas, leyes o guías de trabajo.
Fuente: Red latinoamericana y del caribe para la humanización del parto y nacimiento
1 de mayo de 2009
Semana Mundial por un Parto Respetado 11 al 17 mayo 2009
Cada semana se centra en un tema específico. Cada país plantea y elige sus objetivos e ideas para la adopción de medidas, de acuerdo con el deseo de los individuos o de las organizaciones que trabajan se proponen acciones sobre el tema. Pudiendo organizar folletos, spots publicitarios, marchas, exposiciones...
Iniciado por la ALIANZA FRANCOFONA PARA EL PARTO RESPETADO (AFAR), la Semana Mundial para Respetar el parto es una oportunidad de elevar las voces internacionales sobre un tema específico relacionado con la promoción de nacimiento suave y sin violencia. AFAR es una sociedad sin fines de lucro fundada en mayo de 2003. Un organismo autónomo de los ciudadanos, que no promueve ningún dogma o teoría, y es totalmente libre de valores filosóficos, médicos, religiosos y políticos de líneas de pensamiento.
SMAR 2009 / WRCW 2009
Durante el último Encuentro de la red fue ENCA Europea: La cesárea a aumentado su porcentaje en muchos países. Todavia, este problema se ha amplificado en muchas partes del mundo. Es la responsabilidad de cada Asociación de encontrar una manera de presentar este tema durante la semana del parto respectado.
Campaña en Portugués http://www.youtube.com/watch?v=KaYmqbGaiG0
Campaña en Japonés http://www.youtube.com/watch?v=Lq5Nso9Rtl8
Campaña en Italiano http://www.youtube.com/watch?v=mvnZiHKDMjM
Campaña en Francés http://www.youtube.com/watch?v=q85V5kNMhkQ
8 de abril de 2009
A puro mimo y teta!
3 de abril de 2009
Lleva a tu bebé con Cuidado y Amor...
Estimula el desarrollo motor, cognitivo y emocional de tu bebé, reduce el estrés causado por el cambio del "mundo útero" al mundo exterior. Prolonga la sensación de seguridad, satisfacción, calor y amor que sentía en la panza. Lloran menos, son menos irritables. Los bebés portados en el Rebozo desarrollan su independencia más tempranamente. Facilita y estimula una lactancia a demanda y exitosa.
Permite el mantenimiento de una temperatura estable ya que los bebés no regulan adecuadamente su temperatura corporal pudiendo esto ser causa de: cólicos, llantos, comportamientos de miedo y ansiedad, respiración irregular, sueño inquieto. El bebé siente las diferentes emociones y ritmos del día a día, estando a la altura de los ojos del adulto que lo porta. La circulación sanguínea no se ve afectada ni dificultada.
Los músculos del bebé están relajados permitiendo una respiración más fácil y una digestión más eficaz, disminuyendo los gases, los reflujos y los cólicos. Mantiene una postura muy buena para sus caderas, y columna y sus piernas no están en el vacío como en otros porta bebés del mercado.-